El poder está en TI

El comprender la importancia del impacto de la salud mental en la vida del ser humano, relacionado directamente con la energía, salud y condición física, permite que creemos conciencia de conocer como en momentos de crisis podemos usar herramientas que nos permitan desintoxicar nuestra mente del estrés, ansiedad, angustia o dolor que nos pudiese generar una situación o acontecimiento que  posiblemente  fracture nuestras emociones.

Todos atravesamos por diversas etapas de vida que inevitablemente causan una sensación de malestar presentando síntomas claros de evidenciar como:

La desesperanza, cansancio crónico, falta de interés o motivación, trastornos de sueño o alimentación, falta de autoestima, e inconformidad con el entorno integral en el que nos desenvolvemos.

Aquellas situaciones que no podemos controlar y que llegan como los días de la vida, están y estarán presentes, sin embargo, si podemos controlar la manera de percibir las mismas y cómo nos decidimos a enfrentarlas ya que como el amor, el dolor y su manejo es una decisión.

Esto no tiene una receta ni un manual de ayuda, depende del trabajo que generemos en los buenos momentos para conocernos de manera profunda y constante en nuestra esencia.  

La respiración por ejemplo en una herramienta aparentemente elemental,  pero cuando la analizamos y practicamos para sentir bienestar y oxigenar nuestro cerebro que lleva a la conexión de nuestra mente con el aquí y el ahora, estamos ya generando un principio del bienestar.

El tener la capacidad de comunicar las emociones, de exponer los sentimientos, así como la escucha activa, permite soltar y recibir lo que, rodeados de personas correctas necesitamos para contener y sostener procesos de malestar y convertirlos, en la medida de lo posible en una oportunidad de aprendizaje para la búsqueda del bienestar emocional.

La conexión con la naturaleza que nos permite rodearnos de paz, de grandeza de la creación y que está ahí para todos, más aún para quienes trabajen en la capacidad de apreciarla, cuidarla y respetarla, permite que lo material no sea un obstáculo que delimite nuestras emociones al punto de causarnos inestabilidad.

Dar tiempo de nuestro día a realizar actividades que nos saquen de la rutina como hacer deporte, leer, cantar, bailar, cocinar, actividades que no hagamos por obligación o necesidad, si no que partan de la motivación que nos generan como seres humanos y nos permitan desarrollar nuestras habilidades, nos alentará a mantener la ilusión de lo que representa la vida.

Al estar bien con nuestras emociones, disfrutar de nuestras alegrías y triunfos y honrar el dolor sin perder la capacidad de aprender y descubrir a plenitud, lograremos llegar al equilibrio y conexión de nuestro cuerpo y mente de manera saludable y beneficiosa para transitar en esta maravillosa aventura llamada Vida.

‍

Andrea Crespo

Coordinadora de Convivencia

Colegio Johannes Kepler